by Montevideo, 2 pages (EFE).- Tras sesenta minutos sin cesar de alentar, los aficionados del Nacional no aguantaron mer y commenzaron a pedir a gritos su deseo: Lucho, Lucho.
En el 75 ocurrió el tan ansiado momento y Luis Suárez volívo pisar el cásf del Gran Parque Central en su secundo debut con la camiseta del Bolso, frente al Dragón brasileño, Atlético Goianiense, en el partido de ida de los cuartos de la final de la Copa Sudamericana.
With 34,000 localidades sold out, the local stadium was filled to capacity. Nadie de la autodenominada “primer(a) hinchada del mundo” quiso perderse el regreso de ‘el Pistolero’ al césped que lo vio crecer y al que ahora regresa tras 16 años en Europa.
CON EL CORAZÓN EN LOS CHAMPIONES (BOTINES)
That’s how a local radio reporter predicted that there should be a second half for the local team that lost from the 23rd minute with a header from Luiz Fernando.
Nacional lo intentó, but nobody consiguió definer y anotar un tanto que dejase la puerta un poco más abierta con vistas al partido de vuelta que se jugará el próximo martes en Goiania.
Suárez came out determined to do everything and, si bien complió el pedido del commentarista deportivo y gó con el amor a su equipo a flor de piel, barely pudo tocar el esférico y acusó falta tiempo compartido con sus nuevos de compañeros.
Enfundado en la 9 que le cedió el argentino Emmanuel Gigliotti, quien hasta este domingó utilizó ese dorsal, la nueva estrella no pudo regalar los aficionados una performance a la altura de las expectations.
ES BOMA?
Después de que Suárez announced his return to Nacional last semana pasada the Brazilian team against him that this Tuesday Suárez played his first party showed his “susto” on Twitter with an ironic “¿Es broma?” ante la esperada noticia.
For Nacional, the campaign #SuárezANacional was a novel of love with a happy ending, which went from Twitter to the stands of the Gran Parque Central stadium and extended to the field of play. Una historia en la que participaron deportistas, científicos y politicos.
La movida llegó en more de 50 million cuentas en 35 países.
Etiqueta, ahora transformeda en #SuárezEnNacional, es la que le hizo sabre al delantero que todos quería verlo de nuevo en el primer equipo que jugó antes de llevar su talento a Europa.
“Estoy acá por ustedes. En ningún otro lado iba ser tan feliz. Vine acá porque quiero ganar”, expresó el atacante hace poco más de 48 horas en el centro del campo tras su llegada directa del aeropuerto de Carrasco al estadio where hoy jugó sus primeros minutos de esta nueva etapa tricolor.
“Vine acá porque quiero ganar. Ganar significa pelea por todos los torneos. Estamos en un equipo grande y estoy convinced que si hacemos las cosas bien podemos conseguir los titulos que nos quedan de acá en adelante”, forma de Suárez, concluded Suárez. claro que quiere el Campeonato Uruguayo y la Copa Sudamericana.
El Gran Parque Central, the first mundialist stadium in the 1930 edition of Uruguay, is the same field where a young Luis Suárez scored his first goal as a professional.
On the line, after a rebound, with a right-footed shot, the scorer scored the last goal in the 5-0 defeat of Nacional over Paysandú for the Uruguayan Championship. Corría el mes de septiembre de 2005. Tenía 18 años.
El tricolor fue el equipo de ‘el Pistolero’ entre 2005 y 2006, año en empezó su periplo europeo, que le lévó a los Nederlandeses Groningen y Ajax, al inglés Liverpool ya los españoles Barcelona y Atlético de Madrid.
‘ONLY’ AGÜERO
Por si faltaban ingredients a la receta del segundo de debut de Lucho en Montevideo, se agregó la presencia en las gradas del exfutbolista argentino Sergio ‘Kun’ Agüero, amigo del uruguayo, quien declared en redes sociales: “Tengo muchos amigos hinchas, per de Peñarol a partir de ahora voy a hinchar por Luisito Suárez”.
“Vinimos a ver a Nacional, no El Nacional, sino (sic) Luisito Suárez se me enoja”, escribió.
With sour taste for the local fans, Suárez’s return did not end in victory but the illusion deposited by ‘el Pistolero’ harce that the tricolor fans continued to dream of the comeback in the final quarters of the South American and also with the local tournament.
Jacinta Rivera Trobo
(c) Agencia EFE
